por María Soledad Navarro
Desde el sábado 24 de junio, Mariano Galván y Alberto Zerain están desaparecidos en la arista Mazeno del Nanga Parbat, a una altura de 6112 metros. En la zona se certifican los restos de un alud, pero ninguna señal de los montañistas, y eso parece suficiente para que el gobierno de Pakistán dé por terminada la búsqueda.
Muchas son las teorías que llevan a preguntarnos por qué, no habiendo indicios concretos, materiales y verídicos que muestren su fallecimiento no siguen al menos, desde su mirada, rastreando los cuerpos. Pueden desde un helicóptero que sobrevoló la zona dos veces dar por muerto a dos montañistas avezados que conocían la zona, que habían estudiado las opciones y habían barajado (entre otras cuestiones) la posibilidad de un alud? Ninguno de los dos es kamikaze en su actividad, aman la libertad y los desafíos desde la conciencia y el trabajo duro, y por eso critican duramente el “turismo de montaña”.
Por qué Pakistán abandonó la búsqueda? Desde ningún punto de vista, puede desoírse el rumor de que el no pago de una coima de 25000 dólares, sería el móvil del “abandono de persona” que estarían haciendo los centros oficiales de rescate. Si no fuera así, si la confianza en el gobierno pakistaní existiera y hubiera dado pruebas fehacientes y fidedignas de muertes y no de DESAPARICIÓN, la familia de Mariano Galván, no estaría moviéndose en la más absoluta soledad, sin el apoyo del Gobierno ni de los medios de comunicación. Incluso parte de la prensa prestigiosa que ocupa páginas sobre actividad de montaña lo despiden sin certezas, pero los despiden, y dan vuelta la hoja a nuevas noticias.
Mariano Galván es más que una noticia,enorgullece al montañismo de nuestro país. Es justo detener la búsqueda?
Mariano nunca se detiene ante las negativas, y así trabajó siempre, con principios que nos mueven a movilizar a la gente.
En la historia del mundo, y no sólo de los deportistas de aventura, hay numerosos relatos de personas que hoy cuentan en primera persona esos hechos. Dos de los más conocidos fueron la avalancha en el Everest, tras el terremoto de Nepal en 2015, donde 60 sobrevivientes pudieron relatar lo que ocurrió, y, octubre de 1972, el caso del avión de la Fuerza Aérea Uruguaya, que desapareció rumbo a Santiago de Chile, en medio de los Andes. Este último caso, con la aparición de 16 personas, luego de 72 días en condiciones extremas.
Lo único cierto es que el tiempo pasa, la temporada en Pakistán acaba y si no se resuelve de inmediato una búsqueda supervisada con profesionales confiables sólo quedará como un relato trágico, que mostró la pasividad de un gobierno que da por finalizada una búsqueda por aparentes motivos económicos. Es necesaria y urgente la habilitación de un rescate por tierra. Es necesaria y urgente la movilidad de las personas que aman el montañismo (y también aquellas que no) ante esta búsqueda no realizada. Es necesario y urgente el compromiso con Mariano Galván.
Mariano enseña a cada paso que da, sus principios deben movilizarnos a nodesistir.
Para colaborar en la búsqueda Banco Nación sucursal 1099, caja de ahorro 6470467217, Cbu: 0110647930064704672179 cuil: 27-13569504-7
2 comments
Francisco Sigwald
julio 6, 2017 at 12:14 pm
Realmente creo que deberían dejar que estos alpinistas descansen en paz. Hay un principio que todo rescatista debe respetar y es no arriesgar mas vidas por rescatar el cuerpo de alguien que, aunque no lo quieran creer, muerto esta. Por eso muchos de los alpinistas muertos en el Everest aun están allí y sirven de referencia para el camino a seguir hasta la cima.
Lamentablemente para los que apreciaban y/o amaban a Mariano Galván, el ya no esta.
Organizar un rescate a 6000 metros puede tomar mucho tiempo, de estar vivos, cuanto tiempo ustedes creen que puedan resistir? Una persona enterrada por una avalancha, puede vivir unos 30-45 minutos hasta morir de asfixia.
En una pagina en Facebook lei que habían ciertas imprecisiones con respecto al aparato que daba la localización de los dos alpinistas y que por ello podía ser posible que solo uno de ellos haya sido portado por el alud y el otro quizás haya sobrevivido, pero realmente, para aquellos que practicamos alpinismo, sabemos que normalmente se va encordado el uno al otro para, en caso de caída uno pueda sostener a su compañero. Entonces si Alberto Zerain cayo, se llevo con el a Mariano Galván. Personalmente creo y pienso que deberían dejarlos descansar en paz en su tumba de nieve.
Lucio
julio 6, 2017 at 7:20 pm
María Soledad Navarro, los datos de la cuenta no son los que publica MARISOL GALVAN en su cuenta de Facebook. Favor de chequear y/o corregir
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